Este espacio es mi oportunidad de contar historias con la leve sospecha de que ya no son más mías. Con la extraña certeza de que también las quieren contar ustedes.
Lo mira y entiende que nadie mas la mira de la misma forma que él. Las palabras acarician, las manos sorprenden y enamoran, los ojos comprenden y acompañan. Nunca conoció a nadie así.